Actualmente Volterra es una pintoresca ciudad medieval en la cual todavía se puede disfrutar de la atmósfera de un antiguo pueblo, gracias a su relativo aislamiento que ha limitado el desarrollo industrial y comercial. Es que la ciudad ha permanecido por años detrás de sus murallas del siglo XIII, por lo que casi no ha tenido una gran expansión urbanística, manteniendo casi intacto su aspecto.
Volterra tiene sus orígenes en el siglo VIII AC y se convirtió en una importante capital Etrusca en la antigüedad.
Sus casi 3000 años de historia se pueden disfrutar perfectamente durante una excursión de un día y aún así tener tiempo suficiente para un descanso frente a alguno de los panoramas que nos regalan las antiguas murallas. Además sus callecitas tortuosas, plazas, palacios y torres nos ofrecen una atmosfera especial, misteriosa, cargada de tradiciones.
Qué visitar en Volterra
Volterra está considerada como un santuario viviente de la arquitectura y del arte de los distintos períodos etruscos, romanos, medievales y renacentistas. La historia ha dejado su huella continuamente desde la época etrusca hasta el siglo XIX, con testimonios artísticos y monumentos de gran importancia, fácilmente apreciables con sólo caminar por las calles del centro histórico.
Para comenzar nuestro recorrido, buscamos un mapa en la oficina de turismo de Piazza dei Priori (la plaza principal) para localizar fácilmente todos los puntos importantes.
Seguramente lo primero que veremos es la Piazza dei Priori y el Palazzo del mismo nombre (sede del gobierno de la ciudad), diseñado por el maestro Riccardo en 1239.
Muy cerca se encuentra la Catedral de la ciudad.
Entre los vestigios de la cultura etrusca, se destacan el Museo Etrusco Guarnacci, con testimonios del patrimonio artístico etrusco; la Puerta Etrusca, aproximadamente de los siglos III-II a.C, parte de la muralla de la ciudad y el Parco Archeologico.
Visitaremos también el Anfiteatro romano, del siglo 1 aC., el Museo Cívico (con la pintura más importante de la ciudad desde la época del Renacimiento tardío) y el Museo del Alabastro (Ecomuseo dell’Alabastro).
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