ROMA

Este es sin lugar a dudas el destino elegido por la mayoría de los cruceristas cuando llegan a Civitavecchia. Hay distintas formas de acercarse a la ciudad Santa, por descontado en los tours organizados por el barco, o por nuestra cuenta, con el Shuttle que habitualmente encontramos al bajar del barco y que nos lleva hasta la salida del puerto, y llegar desde allí a la estación (www.trenitalia.com) no es muy complicado, ni lejano, mi recomendación es contratar en el barco la visita a Roma (Transfer o Traslado a Roma, Roma a su aire…….) en esta opción te llevan desde el barco hasta Roma y a una hora concertada te regresan al barco, es la opción más tranquila, si se estropea el ferrocarril (que tampoco son una maravilla), o hay un accidente en la carretera, el barco nos espera, si vamos por nuestra cuenta, y no llegamos a la hora, este marchará sin nosotros, y deberemos viajar por nuestra cuenta hasta el próximo puerto, sin derecho a reclamación alguna, y se dan casos con alguna frecuencia.
Desconfiad de otros pasajeros que organicen excursiones, ellos tampoco se harán responsables, y no hay ley alguna que os defienda, mientras que si lo hace una agencia, ella será la responsable.
Hay una que ofrece visitas sin colas (no la conozco personalmente) www.romaguiada.com , y por descontado podéis visitar la ciudad con audioguias www.playandtour.com, ahora tienen un pack para cruceros que incluyen todas estas escalas que os estoy comentando.

Roma es una ciudad que necesita varios días para visitarla, pero el crucero nos ofrece la posibilidad de catarla, y si nos gusta regresar a ella y dedicarle varios días, la otra opción es volver con el crucero para recordar aquellos días entrañables que pasamos en ella, y pasear por sus calles de forma tranquila, o yéndonos a visitar aquello, que no pudimos ver la vez anterior.
Yo reconozco que tengo que bajar y acercarme hasta la Piazza Navona a tomarme un café en una de sus terrazas, llueva o haga sol, y por descontado patear sus calles.
Roma, la ciudad eterna a los ojos de los visitantes; un conjunto de huellas a seguir para poder reconstruir el libro de historia que se tiene entre manos.
Primera etapa entonces, en el corazón de Roma, el majestuoso anfiteatro Flavio, el Coliseo, sede de los juegos circenses donde los gladiadores se batieron; la Via dei Fori conduce a lo largo del itinerario arqueológico por excelencia, un complejo único en el mundo con templos, basílicas, edificios públicos y sagrados inmersos en el verde de la vegetación y del que el Foro Romano es el corazón. Los restos arqueológicos y las obras de inestimable valor encontradas durante las excavaciones son custodiadas en los museos Capitolinos, en el Campidoglio que fue acrópolis de la ciudad antigua. A poca distancia se encuentra el Teatro Marcello y la famosa Boca de la Verdad, cara de un fauno de mármol en la entrada de la Iglesia de Santa Maria en Cosmedin y que, según la leyenda, tragaría la mano de quienes mienten. La visita de la ciudad continúa siguiendo la rambla del Tiber que lleva a, Castel Sant’Angelo, mausoleo del emperador Adriano, lugar de refugio de los papas y también utilizado como prisión. Desde allí, siguiendo la espectacular perspectiva que ofrece Via della Conciliazione se llega a la Ciudad del Vaticano, sede del estado pontificio, con la célebre plaza San Pedro, con el abrazo universal de la columnata del siglo XVII de Bernini y la magnificencia de la Capilla Sixtina con el precioso "Juicio Universal", obra maestra de Miguel Ángel del siglo XVI. Roma es sede de las principales instituciones del país y no se pueden dejar de mencionar sus edificios, sus basílicas, sus plazas como Plaza de España con la famosa escalinata de la Trinità dei Monti , Plaza Farnese y Plaza Navona con la Fuente de los Cuatro Ríos de Bernini; ni qué hablar de la Fontana di Trevi, del siglo XVIII, a la que los turistas lanzan un moneda para estar seguros de volver a la ciudad eterna.
En los alrededores de Roma, la zona de Castelli Romani es un atractivo para los que quieren excursiones sin preocupaciones y un fresco refugio durante las cálidas noches veraniegas. Ostia, en cambio, además de ser un reconocido balneario del litoral del Lacio, merece una mención por sus excavaciones arqueológicas de Ostia antigua, el mejor ejemplo de ciudad de época romana que llega hasta nosotros.
Citar todas las cosas que es posible ver y hacer en Roma y sus alrededores es empresa ardua; es una ciudad que sabe satisfacer los deseos de sus visitantes a lo largo y a lo ancho . Pero para conocerla hasta el fondo, en su alma romana, uno se tiene que poner en contacto con su gente y visitar los mercados como Porta Portese, mercado de pulgas o los barrios de Trastevere, Testaccio, San Lorenzo y Campo de’ Fiori dónde el aspecto más juvenil y a la moda de la ciudad emerge en un desborde de diversión, típico de las grandes capitales europeas.
Una vez en Roma, podeis tomar el Bus Turístico, a mi me encanta, te muestran la ciudad de forma panorámica, que para cualquiera de los casos que he comentado sirve y si queremos nos bajamos donde queramos a patear la ciudad por nuestra cuenta.
Los puntos de arrancada del Bus Turístico es Vía Marsala o Santa Maria Maggiore, ambas están ubicadas cerca de la Stazione Termini, pero la ventaja del Bus es que puedes adquirirlo y subir donde quieras, y en el Vaticano hay una parada.
Hay dos líneas, la A con una duración de 110 minutos y la B de 80 minutos, la primera tiene una frecuencia de paso de 20 minutos y la segunda de 60.
Para nosotros no tiene mayor importancia, pero el billete sirve para dos días.
QUE VISITAR EN ROMA
Monumentos y lugares turísticos
Ara Pacis
Este altar es uno de los monumentos más importantes de la antigua Roma. Fue construido en el año 13 a.C. para conmemorar las victorias de Augusto en España y la Galia. Originalmente se erigió en las proximidades de la Via del Corso, pero en 1938, con motivo del bimilenario de Augusto, fue reconstruido en la plaza que lleva su nombre. Es un recinto cuadrado con el altar en su centro y toda la superficie decorada con frisos y relieves esculpidos en mármol.
Arco de Constantino
Es el más grande de los arcos triunfales romanos, con 25 metros de altura, y fue erigido en el año 313 para conmemorar la victoria de Constantino sobre Majencio, en el momento en que Roma iniciaba su decadencia en favor de Constantinopla. Por este motivo, la riqueza de la ciudad no era tanta y el arco se construyó con mármol sustraído de otros edificios y monumentos preexistentes. Se levanta cerca del Coliseo, y señala el límite entre esta zona y el Foro.
Arco de Tito
El arco de Tito se encuentra en el punto más alto de la vía Sacra y fue construido en el año 81 en memoria de las victorias de Vespasiano y de Tito. Tiene un único arco, semicolumnas acanaladas y un ático superior.
Castello Sant'Angelo
Fue hecho construir por el emperador Adriano, en el año 130, para ser utilizado como su mausoleo y guarda los restos de la dinastía imperial hasta Caracalla. Aureliano lo integró como fortaleza a la muralla aureliana; con posterioridad sirvió de prisión y, cuando en 1277 pasó a ser propiedad del Vaticano, fueron agregados los apartamentos pontificios. Hoy es sede del Museo Nacional del Castel Sant'Angelo. El ángel de bronce del siglo XVIII que da nombre al castillo surge de una leyenda según la cual el arcángel San Miguel apareció y acabó con una peste que azotaba Roma en el año 590. El puente de Sant'Angelo fue durante siglos el principal puente entre San Pedro y el centro de la ciudad. En 1669, Bernini colocó la balaustrada con las estatuas de los ángeles y los símbolos de la Pasión.
Circo Máximo
Se extendía al pie del Monte Palatino. Sus grandes dimensiones, 620 metros de largo y 180 de ancho, lo convertían en el circo más grande del mundo. Podía recibir entre 150 y 320 mil personas, alcanzando el límite máximo en el siglo III. Estaba dedicado sobre todo a las competiciones con carros (cuadrigas). Antes de la construcción del Coliseo, también se utilizaba para combates de gladiadores y con bestias salvajes. A modo de protección para el público contaba con un foso separando la arena (pista de combate) y las gradas.
Coliseo (Anfiteatro Flavio)
De arquitecto desconocido, es un monumento que no tiene igual en el arte romano. Se comenzó a construir con Vespasiano en el año 72 y fue inaugurado por su hijo Tito el 80. En él se desarrollaban combates de gladiadores, de hombres contra bestias y fue escenario del suplicio de los primeros cristianos. Cuando dejó de utilizarse cayó en un lento deterioro, debido en parte al pillaje, hasta que un edicto del papa Benedicto XIV lo consagró a la memoria del martirio cristiano, frenando así su destrucción. Consta de 4 pisos, de los cuales los 3 primeros están constituidos por 80 arcos, separados por pilares con semicolumnas jónicas, dóricas y corintias. Tenía una capacidad de cerca de 50 mil personas.
Columna de Trajano
Es un monumento sepulcral, obra maestra de la escultura, erigida en el siglo II en el foro, en memoria de Trajano. En el basamento, en la cámara sepulcral, fueron depositados en una urna de oro los restos del emperador, pero la preciosa cámara no resistió el saqueo medieval. A lo largo de toda la columna y en forma de espiral, con una longitud de 200 metros, están esculpidos 2500 figuras, frisos y bajorrelieves, que cuentan escenas de la vida y batallas de Trajano. En lo alto estaba colocada una estatua de bronce de Trajano, que curiosamente fue reemplazada en el siglo XVI por la de San Pedro.
Domus Aurea
El emperador Nerón la mandó construir con el objetivo de hacer una inmensa residencia, que debería ser la más grande y bella del mundo. Por su rica decoración tomó el nombre de Domus Aurea: Casa de Oro. Los amplios ambientes están adornados con estuco y pinturas en las que se inspiraron los artistas del renacimiento, por el particular estilo llamado "grotesco".
Foro
Símbolo de la antigüedad, era el centro de la vida política, jurídica y social de la Antigua Roma. Fue muy dañado durante la invasión bárbara. Se conservan las ruinas de la basílica Emilia, la Curia, antigua sede del Senado Romano, el Arco de Settimo Severo, construido en 203, las tribunas desde donde hablaban los oradores romanos, la columna de Foca, el templo de Vesta, donde ardía el fuego sagrado, símbolo de la continuidad de la vida de Roma y casa de la Vestal. Tomando la Via Sacra, encontramos el templo de Antonino y Faustina y la basílica de Majencio. La Via Sacra termina junto al Arco de Tito.
Mercado de Trajano
Considerada en la antigüedad una de las maravillas del mundo clásico, hoy vemos sólo una parte de aquel esplendor. El complejo de 150 locales fue proyectado en el siglo II por Trajano. Hacia Via Nazionale se encuentra la gran sala que es el centro del complejo, y en el interior del área arqueológica se puede visitar el Museo Palatino. El edifico consiste en un gran hemiciclo de dos pisos con una torre construida en el siglo XIII para defensa. El Mercado de Trajano podría considerarse el primer centro comercial cubierto de la historia.
Panteón
En Plaza de la Rotonda se encuentra una de las mayores obras maestras de la arquitectura romana. Este lugar, dedicado a varias divinidades, fue construido en el 27 a.C. por el cónsul Agripa, yerno de Augusto. En 609 fue donado por el emperador Foca al papa Bonifacio IV y fue transformado en iglesia, lo que favoreció su conservación hasta nuestros días. Su cúpula tiene una altura de 43,4 metros y su fachada presenta 16 columnas de granito monolítico de 14 metros. El interior muestra una planta circular. La única abertura está en el centro de la cúpula y crea un efecto lumínico particular. Conserva numerosas obras de arte y las tumbas de los reyes de Italia y la de Raffaello.
Termas de Caracalla
Tenían capacidad para 1700 personas y se utilizaron hasta el siglo VI, cuando las invasiones de los godos acabaron con el acueducto que las alimentaba. El complejo estaba adornado con estatuas, en un ambiente muy refinado, y a las piscinas de aguas calientes, tibias y frías se anexionaron bibliotecas y jardines, que daban al lugar un aire placentero y de distinción.
Basílica de San Pablo Extramuros
Por sus dimensiones, es la segunda basílica después de la de San Pedro en el Vaticano. La erigió Constantino sobre la tumba del apóstol Pablo; Valentiniano II la amplió en el 386 y Onorio en el 395. Sufrió un importante incendio en 1823. Hoy es aún visible el arco triunfal de la época de San Leone Magno, del siglo V, el Cristo detrás de dos ángeles que se acompaña en el lado posterior de mosaicos del siglo XIII, creados por Pietro Cavallini para la fachada de la basílica.
Hoy la basílica muestra un gran pórtico con la estatua de San Pablo en el centro, entrada a las cinco naves de la basílica.
Basílica de San Giovanni in Laterano
Es la catedral de Roma, fundada por Constantino en el siglo IV. Muchas veces destruida y reconstruida, la basílica actual corresponde al siglo XII. Con el paso del tiempo numerosos pontífices agregaron decoraciones y obras de arte. En ocasión del Jubileo del 1650 Inocencio X encargó una reestructuración interna a Borromini. Su importante fachada en mármol travertino fue construida por Alessandro Galilei en 1735. Pío IX y Leone XIII también siguieron obras de reconstrucción y restauración.
En lo alto de su balaustrada se levantan 15 estatuas de santos de dimensiones gigantescas, con la del Redentor al centro. En el pórtico de la izquierda se puede admirar una estatua de Costantino traída de las Termas Imperiales del Quirinale. La gran puerta central de acceso presenta preciosos batientes en bronce. La puerta de la derecha, como en la Basílica de San Pedro, se abre sólo para el Año del Jubileo. En su interior, una cruz latina a cinco naves de 130 metros de longitud, sorprenden su cielorraso dorado y el hermoso pavimento. Al fondo de la enorme nave central, un altar con frescos de Barna da Siena guarda un precioso contenedor de plata con las reliquias de las cabezas de San Pedro y San Pablo.
Basílica de Santa María Maggiore
Fue erigida en el siglo IV, pero sufrió con el transcurso del tiempo numerosas modificaciones, por lo que presenta diversos estilos arquitectónicos. Su edificación es atribuida a un sueño del Papa Liberio, en el 356, según el cual la Virgen lo invitaba a construir una iglesia en el lugar donde al día siguiente encontraría nieve. El milagro se produjo, y sobre el lugar donde se encuentra hoy la basílica nevó. El campanario, construido en 1375, es el más alto de Roma. El interior ha conservado un aspecto bastante parecido al original. Se divide en 3 naves con columnas monolíticas con capiteles jónicos. El cielorraso está adornado con el emblema del toro de Alejandro VI. El pavimento data del siglo XII. En su interior se conservan numerosas obras de arte de maestros italianos.
San Luigi dei Francesi
En esta iglesia, construida en el 1589 por Domenico Fontana bajo diseño de Giacomo Della Porta, se conservan muchas obras maestras, entre ellas obras famosas de Caravaggio. Comenzó a construirse en 1518 y fue completada en 1589.
Su grandiosa fachada es de mármol travertino, con balcón central, y tiene dos nichos con estatuas de Pierre l'Estache. Es famosa porque alberga los restos de muchas personalidades francesas y obras maestras.
San Pietro in Vincoli
Es una iglesia muy antigua, fue mandada construir por Eudosia, esposa del emperador Valentiniano III, pero su aspecto actual data del año 400. En el interior está el Mausoleo de Julio II, obra de Miguel Angel, y en el centro el Moisés, obra maestra del Renacimiento, de incomparable expresividad y belleza. La fachada está precedida por un pórtico con cinco arcos sobre pilares octogonales de piedra.
Santa Maria In Trastevere
Es la más antigua basílica de Roma. Fue edificada en el año 222 por el Papa San Callisto, y reconstruida en el siglo XII por el Papa Inocencio II. Está ubicada en uno de los barrios más característicos de la ciudad, punto de referencia de la agitada vida trasteverina. Son interesantes su fachada, decorada con un espléndido mosaico representando a la Madonna en el trono, y el pórtico, que tiene una balaustrada con 4 estatuas de pontífices. Al lado se eleva un bello campanario románico del siglo XII. El interior consta de 3 naves divididas por 22 columnas provenientes de monumentos paganos.
Santa Maria in Cosmedin
Es una de las iglesias medievales más refinadas de Roma, famosa porque en uno de sus muros exteriores se encuentra incrustada una antigua máscara de Tritón, la Bocca della Veritá (boca de la verdad). La leyenda dice que si alguien mete la mano derecha dentro de la boca habiendo dicho una mentira, ésta se cerrará de golpe.
Campo dei Fiori
El Campo di Fiori (campo de flores) es una plaza muy animada que de lunes a sábado es sede de un mercado de verduras y flores. Hay además gran cantidad de restaurantes típicos y bares.
Fontana di Trevi
Es la fuente más famosa de Roma, obra del arquitecto Salvi en 1735. Su nombre deriva de que se encuentra en la confluencia de tres vías. Es considerada una de las fuentes más bellas del mundo. El palacio que hace de fondo a la fuente era del Duque de Poli. Según dice la leyenda, arrojando una moneda al pedir un deseo se asegura que el deseo se cumplirá y además que algún día se volverá a Roma. La película de Fellini "La Dolce Vita" contribuyó a realzar la fama de esta fuente.
Estructuralmente, la fuente tiene 4 columnas que forman 3 nichos. Las esculturas que la componen narran variadas escenas alegóricas. En el nicho central se encuentra la estatua de Neptuno, representado sobre un coche en forma de concha tirado por caballos alados. Las esculturas laterales representan la Abundancia y la Salud. En la fuente, simbolizando el mar, se encuentran dos esculturas de tritones y animales marinos mitológicos y reales.
Monumento a Vittorio Emanuele II - Altare della Patria
Grandioso monumento edificado en 1885 para celebrar el cincuentenario del Reino de Italia. LLamado también Vittoriano, se encuentra en la Plaza Venecia. Fue inaugurado en 1911, aunque tardó 20 años más en ser terminado. Una enorme escalinata, flanqueada por leones alados, lleva al altar de la Patria, en homenaje al "Soldado desconocido" caído en la Primera Guerra Mundial. El altar presenta altorrelieves de Angelo Zanelli y la estatua de Roma en su centro. En el frente del monumento está la gigantesca estatua ecuestre de bronce de Vittorio Emanuele II. A sus espaldas el monumento se completa con un grandioso pórtico con columnas de 15 metros y las dos colosales Victorias aladas de bronce.
Piazza del Campidoglio - Monte Capitolino
La Piazza del Campidoglio, diseñada por Miguel Ángel en 1538, es el atractivo turístico más sobresaliente del Monte Capitolino. Es un clásico del urbanismo renacentista. Bordeada por tres palacios, el Palazzo dei Conservatori, el Palazzo dei Senatori y el Palazzo Nuovo, es la sede del gobierno y administración de la ciudad. Los palacios dei Conservatori y el Nuovo actualmente albergan el Museo Capitolino que posee incontables estatuas clásicas, entre ellas Niño con espino, Galo muriendo, Venus Capitolina y el Discóbolo.
Piazza del Popolo
Es considerada una de las mejores obras urbanísticas de la ciudad. Se encuentra en el punto de confluencia de 3 calles importantes: las Vias del Corso, del Babuino y de Ripetta. Se caracteriza especialmente por la Porta del Popolo, obra de Bernini, que era la puerta de acceso a Roma para los viajeros que venían del norte.
En el centro de la plaza se encuentra el segundo obelisco más grande de Roma, el Obelisco Egipcio realizado en 1200 a.C. En la pendiente de la terraza del Pincio se levanta la iglesia de Santa María del Popolo, de época medieval, completamente renovada en el Renacimiento. En la plaza se encuentran dos iglesias externamente muy similares: Santa Maria in Montesanto y Santa Maria dei Miracoli, realizadas en el siglo XVI por Bernini.
Piazza Navona
Es una de las plazas más bellas y famosas, donde es posible admirar obras maestras de Bernini, Borromoni y della Porta, notables exponentes del arte barroco. La forma elíptica de la plaza se debe a que fue erigida sobre el antiguo Estadio de Domiciano. Encontramos en ella 3 fuentes. La central, la Fontana dei Fiumi, obra de Bernini, con la estatua alegórica de los cuatro ríos principales del mundo: el Ganges, el de la Plata, el Danubio y el Nilo. Las laterales son la Fontana del Moro diseñada por Bernini y la Fontana del Nettuno proyectada por Giacomo della Porta. En el centro de la plaza se encuentra la iglesia de Santa Agnese in Agone, obra de Borromini, que con su fachada cóncava representa un magnífico ejemplo de edificio barroco. En su interior se pueden ver restos de la iglesia antigua y del Estadio de Domiciano.
Piazza di Spagna - Fontana della Barcaccia
Es una de las plazas más distinguidas de la ciudad, caracterizada por la gran escalinata de la Trinidad del Monte. Está ubicada entre las calles más exclusivas y elegantes de Roma: Via Condotti, famosa en todo el mundo por la presencia de numerosas tiendas de moda italiana, como Armani, Versace y Valentino; Via Frattina, elegante y muy frecuentada; Via del Babuino, con sus palacios de los siglos XVII y XVIII y centro de las antigüedades romanas...
La gran escalinata de Trinidad del Monte fue construida en mármol travertino en 1724. En el centro de la plaza se encuentra la elegante Fontana della Barcaccia, obra de Pietro Bernini. En lo alto de la escalinata se ve, detrás de un obelisco egipcio, la iglesia de Santa Trinidad del Monte, de 1495. De Piazza di Spagna, subiendo la escalinata, se puede acceder a la terraza del Pincio, desde donde se divisa uno de los panoramas más espléndidos de la ciudad.
Villa Borghese
Es un hermoso parque público, el más extenso de Roma, caracterizado por sus caminos, árboles y lagos. Desde la mejor terraza de la ciudad, el Belvedere del Pincio, la vista de Roma es magnífica. En el área hay tres museos importantes: la Galería Borghese, la Galería Nacional del Arte Moderno y el Museo Etrusco de Villa Giulia, y un parque zoológico recientemente renovado (Bioparco).
CIUDAD DEL VATICANO
El Estado denominado Ciudad del Vaticano es, con sus 0,44 km2 de superficie y sus 1000 habitantes, el país menos extenso y poblado del mundo. Sede de la religión católica, recibe constantemente la visita de miles de fieles o simplemente turistas deseosos de admirar toda la riqueza artística que encierra.
Se encuentra dentro del tejido urbano de la ciudad de Roma, con la que tiene 4 km de frontera. El Estado nació a raíz del Pacto de Letrán, firmado por Pío XII y Benito Mussolini el 11 de febrero de 1929.
El jefe del Estado es el Papa, elegido por un cónclave de cardenales, y los ingresos económicos provienen de donaciones de fieles, de las entradas a sus museos y ventas de sus publicaciones. El Vaticano posee una estación ferroviaria y su propia estación de radio. Además de los bienes que se encuentran dentro de sus límites, son propiedad del estado numerosos palacios y basílicas que se encuentran en Roma (San Giovanni in Laterano, Santa Maria Maggiore, San Paolo fuori le Mura, entre otros) o aún fuera de sus límites (tales como el Palacio Pontificio y Villa Barberini, en la ciudad de Castel Gandolfo, y la Basílica de San Antonio en Padua).
La ciudad-estado está rodeada por una muralla, siendo la Plaza San Pedro su conexión con Roma y el corazón del Vaticano. Se encuentran dentro de las murallas el Palacio del Vaticano, la Capilla Sixtina, la Basílica de San Pedro y los Jardines del Vaticano.
Plaza San Pedro
Esta plaza, que se extiende frente a la Basílica de San Pedro, fue construida entre los años 1656 y 1667, proyectada por Bernini, con el objeto de recibir una gran cantidad de fieles. Su majestuosidad reside en las 4 filas de columnas, que en un total de 284, enmarcan su forma elíptica. En el centro se halla el obelisco egipcio que estaba situado en el Circo de Nerón, lugar donde dicen fue martirizado y ejecutado San Pedro.
Basílica de San Pedro
Es la basílica más grande que se haya construido, con una longitud de 186 metros y una altura de 119 metros en su cúpula; su superficie es de unos 15.000 m2. La construcción se realizó entre 1506 y 1512, aunque durante más de un siglo diferentes artistas trabajaron en su terminación. En ese sitio había anteriormente una basílica que mandó construir Constantino en el siglo IV, lugar en donde estaba el Circo de Nerón y en el que fuera martirizado y muriera San Pedro, el primer Papa. La antigua basílica fue demolida y se levantó la actual. En la obra participaron numerosos artistas: Bramante, Rafael Sanzio, Miguel Angel, Maderno... Miguel Angel fue el autor de la enorme cúpula de 42 metros de diámetro, cubierta de mosaicos y con una inscripción cuyas letras tienen 2 metros de altura. Se puede subir a la cúpula por un ascensor.

El acceso a la basílica, a través de sus cinco puertas, está custodiado por las estatuas de Carlomagno y Constantino. La puerta de la derecha es la Porta Santa y sólo la abre el Papa para el Año del Jubileo. En la parte derecha de la nave central se encuentra la estatua de San Pedro, y en el altar destaca el baldaquino de Bernini, un enorme dosel de bronce de gran belleza que enmarca la "Cattedra Petra", también obra de Bernini. Debajo de la basílica está la necrópolis que guarda los restos de San Pedro y monumentos funerarios de diversos papas, realizados por importantes artistas.
En la basílica se conservan numerosas obras de arte; sin duda la más destacada es "La Pietá", obra cumbre de Miguel Angel.
Capilla Sixtina
Se encuentra en el Palacio del Vaticano y fue mandada construir por Sixto IV entre 1475 y 1481. El grandioso fresco del techo, que representa el Génesis, fue encargado a Miguel Ángel, y las pinturas de las paredes laterales a prestigiosos pintores de la época: Boticelli, Perugino y Ghirlandaio, que representan escenas del Antiguo y Nuevo Testamento. Sólo 24 años después de finalizar esta gran obra, se le encargó a Miguel Ángel pintar las paredes de detrás del altar con un fresco que reflejase el Juicio Final, uno de los más impresionantes de todos, y para lo cual fue necesario tapar otros frescos de Perugino y cerrar dos ventanales.
Rodeando a la Capilla Sixtina están las cuatro salas de Rafael, adornadas con frescos que él mismo y sus discípulos pintaron para el Papa Julio II. Junto a ellas está la Galería de Rafael, con una bóveda pintada por el artista.
Museos del Vaticano
En ellos se encuentran obras que representan el arte de todo el mundo, que fueron reunidas por los sucesivos papas a lo largo de la historia y que forman colecciones únicas en el mundo. Entre los museos que componen el conjunto destacan: el Museo Gregoriano de Arte Egipcio, con 9 salas que reúnen colecciones de arte del Antiguo Egipto; el Museo Gregoriano Etrusco, que reúne objetos de las civilizaciones pre-romanas de Etruria y el Lacio, desde el Neolítico hasta el Siglo I; el Museo Misionero Etnológico, con más de 40.000 objetos procedentes de países no europeos referidos a temas religiosos; y la Colección de Arte Religioso Moderno, donde se pueden apreciar 55 salas con arte sacro moderno de todo el mundo. También se pueden visitar el Museo de la Antigüedad Clásica, el Museo Pío Cristiano, la Galería de Arazzi, el Museo Profano y el Museo Histórico Vaticano, así como la Pinacoteca del Vaticano, con 18 salas donde se exponen 460 pinturas de autores famosos, entre ellos Caravaggio, Leonardo y Rafael, y la Biblioteca, que reúne una impresionante colección de manuscritos medievales y renacentistas que supera el millón de ejemplares.

No hay comentarios:

Publicar un comentario