Desde el Lago Bohinj ascenderemos en funicular hasta el Monte Vogel, dónde se halla una de las Estaciones de Esqui más populares de Eslovenia, situada en el corazón del Parque Nacional de Triglav.
Gracias al Teleférico de Vogel veremos maravillosos paisajes con las montañas y bosques al fondo y como protagonista el Lago Glaciar de Bohinj.
A unos 1.500 metros de altitud podremos fotografiar los imponentes Alpes Julianos, entre los que destaca el Pico Triglav, con 2.863 metros de altura, el monte más alto de todo el país, peregrinaje de escaladores, senderistas y símbolo del país.
Desde aquí observamos también los remontes y pistas que componen la estación, sin duda las mejores vistas del Parque Nacional, sobretodo con un día despejado como el nuestro, pudimos obtener unas vistas de infarto, incluso en verano se pueden ver aún las cumbres nevadas de los picos más altos.
A pesar de que algunos dicen que la entrada al teleférico es un poco elevada, nosotros creemos que merece la pena poder ver el Valle de Soca, rodeado de rocosas montañas, desfiladeros angostos y cimas de vértigo.
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