SANT PAU DE SEGÚRIES

El pueblo de Sant Pau de Segúries es el cabeza de municipio, el cual comprende, además, del agregado de la Ral.

El término es atravesado por la carretera comarcal C-26. A la altura del pueblo de Sant Pau de Segúries desde donde sale una carretera que, entre curvas pronunciadas, se adentra en la Garrotxa, en dirección a la Vall de Bianya y Olot. Cerca de Capsacosta que pasaba por el antiguo Camino Francés o Strata Francisca, conocido también como Vía Romana, del que aún quedan fragmentos de vía adoquinada que recuerdan la antigua vía.

LA RAL

El lugar pertenecía a la alcaldía de la Rovira del monasterio de San Juan de las Abadesas. Jaume I fundó en 1248 una villa real, centro de la veguería de La Ral, pero la inmediata creación de la veguería de Camprodon dificultó la prosperidad de la nueva ciudad, que quedó, además, muy afectada por el terremoto de 1425. La iglesia de Santa María de la Gracia (1388) fue reconstruida en 1609; es sufragánea de la de Sant Pau de Segúries.

El núcleo más antiguo de Sant Pau lo encontrará en sus calles estrechas, aunque actualmente se han ido ensanchando.

Sant Pau Nou, nueva iglesia, construida por los arquitectos Pablo Montguió y F.Vayreda, ubicada a la salida del pueblo de Sant Pau de Segúries, en dirección a Camprodon.

Se empezó a construir en 1960 y fue bendecida en 1971. Es un edificio de líneas modernas y funcionales, con planta diagonal y grandes vidrieras. El escultor F.Fajula fue el encargado de su decoración.

Seguiremos nuestra ruta por la fuente de La Puda. Situada en el Bach del Callís y rodeada de una majestuosa hayedo, la fuente de agua sulfurosa tiene reconocidas propiedades medicinales.

Seguimos nuestro recorrido en dirección al Camino Romano A nuestro paso encontraremos la antigua iglesia, levantada a la izquierda del pueblo de Sant Pau de Segúries, a 950 m de altura. 

Muy cerca y en plena Vía Romana, encontramos la fuente de La Arc.

La vía Romana

Las referencias más antiguas de investigaciones hechas de esta vía datan del s. XVII. Se trata de una vía romana secundaria que cubre el trayecto Lunca-Besalú-Valle de Bianya- Coll de Ares. Podrá apreciar las técnicas de construcción de las vías romanas: muros de contención, caminos en serpiente para salvar la pendiente, pilones guarda-ruedas, etc.

Continuamos en dirección a Camprodon. En nuestro paso encontraremos el Pont de La Rovira

Ante nosotros encontraremos tres majestuosas casas, las cuales han sido catalogadas por su arquitectura y belleza:

La Rovira: situada delante del puente.

Can Falguera: situada en el desvío de la Ral.

Can Pairó: situada en la real.

Si continúa llegaremos a la Ral, donde se encuentra la iglesia de Santa Maria de Gracia de la Ral (1388 a 1609). La anterior fue derruida por un terremoto en 1428.

HISTORIA

Los orígenes del pueblo se remontan a la edad media tal como lo evidencia que entre finales del siglo IX y primeros años del siglo XI se encuentra documentado el topónimo Segúries con diversas variantes: Seguriliis (898), Segurilias (904) o Seguril (1054 ).

Desde la primera mitad del siglo X esta región estuvo bajo la jurisdicción del monasterio de San Juan de las Abadesas; año 1127, el abad Berenguer Arnau obtuvo del conde Ramón Berenguer IV permiso para establecer un mercado semanal en la población.

Parece que esta sufrió los efectos de los terremotos acaecidos en 1152 y que el abad Pedro Soler (1203 a 1217), ordenó la reconstrucción. El Abad que le sucedió, Arnau de Cursavell, concedió carta puebla y franquezas en 1217 a los que vivían o quisieran establecerse, sin embargo, la población no pasó más de 30 o 35 fuegos, cifra que disminuyó a menos de 20 debido a la peste negra del siglo XIV.

 Durante este periodo, el vecindario de la Ral, adscrito al municipio de San Pablo, tuvo más importancia que este por motivos administrativos. La explicación es que el rey Jaime I quería fundar una veguería en Camprodon, pero ante la negativa del monasterio de San Pedro de Camprodon a ceder la villa para que pasara a ser de dominio real, el monarca consiguió, de abad de San Juan el plan de Miralles en 1248. en este lugar estableció un núcleo urbano, llamado la Real, en el que situó la veguería. El año 1206 la jurisdicción se extendía por Sant Joan, Sant Pau, el Riberal de Sant Joan, Surroca, Ogassa, Sant Pere Espuig, Santa Llucía de Puigmal, Sant Salvador de Bianya, Tregurà y Salarsa.

Otro hecho que corrobora la importancia de la Ral es que en 1388 se construyó una iglesia dedicada a Santa María de Gracia; en 1609 se reconstruyó la primitiva. La veguería con los años fue perdiendo competencias hasta su abolición en 1716.

Estancamiento de la Ral coincidió con el progresivo crecimiento urbanístico y demográfico del núcleo de Sant Pau, en el siglo XVII tenía 51 familias; en el año 1787 vivían 379 personas, cifra que en 1860 fue de 486.

La actividad económica predominante era la agricultura, con el cultivo de cereales, patatas, maíz y forrajes, y la ganadería con explotaciones de ganado vacuno y ovino. También se establecieron molinos de harina junto a cursos fluviales. No será hasta finales del siglo XIX y la primera mitad del siglo XX cuando el sector económico se diversificó con una explotación de fabricación de cemento y dos centrales hidráulicas (El Marinero y Brand) de producción de energía eléctrica por medio de la aprovechamiento del agua del río Ter. También se instaló, entre otros sectores, la fábrica Llaudet de tintura y acabados de algodón, la fábrica de embutidos Lapedra y un aserradero.

Ha sido durante los siglos XIX-XX que Sant Pau de Segúries ha modernizado sus equipamientos para ofrecer una calidad de vida digna a los que residen habitualmente y los turistas esporádicos; la iglesia parroquial, de diseños innovadores (1971), la escuela pública "Els Pinets", el centro de asistencia primaria, el pabellón polideportivo, construido en los años sesenta y que fue de los primeros en hacerse a la provincia,  transformaciones que también han tenido un claro reflejo en el ámbito urbanístico, con la expansión del casco urbano en las proximidades de la carretera que atraviesa la población, con la edificación de viviendas y naves industriales. Pero también ha habido un crecimiento del tejido asociativo, siendo uno precedente la Hermandad de Sant Pau, creada en 1894, y actualmente el Club Deportivo y Cultural, que cuida de la organización de los principales actos lúdicos de la población entre los que destaca la Caminata Popular por la Vía Romana de Capsacosta.