ISLA DE TENERIFE
Las fiestas tradicionales de Icod de los Vinos merecen ser vividas: la de los cestos y bollos, en Santa Bárbara; el baile del Tajaraste, en El Amparo o los hachitos de San Juan. Mención especial para la víspera de la fiesta de San Andrés con la bajada de las tablas.
LA OROTAVA
Esta diversidad de ambientes favorece el asentamiento de una rica y diversa naturaleza, un abanico de comunidades que alberga numerosas especies animales y vegetales, con más de 120 endemismos locales, algunos de ellos muy escasos y amenazados.
Entre los hábitats naturales de Anaga se encuentran algunas de las mejores manifestaciones de los ecosistemas canarios. Destacan por su buen estado de conservación los bosques de laurisilva de sus cumbres, los sabinares como el de Afur o los cardonales tabaibales del extremo oriental del macizo.
Entre su reducido número de edificaciones, Taganana conserva un templo dedicado a Nuestra Señora de las Nieves, uno de los más antiguos de la Isla, en cuyo interior permanece un auténtico tesoro artístico, un valioso tríptico de la escuela flamenca del siglo XVI. En el entorno del caserío, la riqueza natural del macizo de Anaga muestra su magnífica belleza en forma de frondosos bosques de laurisilva, playas prácticamente vírgenes y roques espectaculares.
El municipio de Santa Cruz de Tenerife tiene una extensión de 151 Km2, que ocupa una amplia zona del Noreste Tinerfeño, su altitud va desde el nivel del mar hasta los aproximadamente 750 metros de la cima del término municipal, en tanto que conforma un crisol de microclimas y paisajes de lo más variado.
Dos Patrimonios de la Humanidad, un Parque Nacional y 42 espacios naturales protegidos, estos son algunos de los tesoros que descubrirás en Tenerife. En solitario, con tu pareja, en compañía de amigos o con la familia, prepárate a vivir experiencias únicas gracias a la amplia oferta de actividades que harán inolvidable la estancia en la isla.
Así define el cabildo en su página web a la hermosa Isla de Tenerife, una certeza que sólo se entiende después de visitarla.
En Tenerife vivirás cada día una experiencia distinta. Salir de compras por su capital, visitar un museo o asistir a alguno de los distintos espectáculos que se celebran son algunas opciones a las que no te podrás resistir.
Tampoco podrás prescindir de los diversos parques temáticos, pensados y diseñados para la diversión de grandes y pequeños. Aunque, en realidad, tendrás la impresión de que toda la isla es un gran parque con distintos ambientes e infinidad de cosas por hacer. Y todo ello bajo el dominio de un majestuoso volcán, el pico más alto de España, que hace de guardián de esta isla llena de contrastes.
Prepárate también para disfrutar de una increíble variedad de paisajes de extraordinaria riqueza natural en un territorio surcado por barrancos, con espectaculares acantilados, bosques de especies prehistóricas, extensas masas de pino canario (especie endémica de las Islas Canarias), sorprendentes formaciones rocosas, acogedoras calas y animadas playas, conos volcánicos y malpaíses, valles con cultivos tropicales... Espacios que albergan multitud de especies de flora y fauna, muchas de ellas exclusivas de la isla.
Y a todo ello hay que añadir aquello por lo que la visitan miles de turistas en el mundo, su excelente clima, durante todo el año y sus playas.
La Isla tiene una vertiente norte, más húmeda, fresca y con playas artificiales, y el Sur donde el clima es siempre soleado, con playas abiertas al mar y grandes estructuras hoteleras.
ADEJE
La Villa de Adeje, núcleo poblacional del municipio del mismo nombre, conserva un casco histórico donde perviven las huellas de su prolongada historia. Situada en las zonas altas del municipio, la villa fue, antes de la conquista, lugar de residencia del mencey Axerax o Gran Tinerfe, el último de los grandes reyes guanches de Tenerife. Después de la conquista hispana, la villa recibió la influencia colonial que quedó plasmada en casonas señoriales y templos católicos.
Entre los edificios religiosos destacan la iglesia de Santa Úrsula y la del Convento de Nuestra Señora de Guadalupe y San Pablo, donde hoy se encuentra un interesante museo de arte sacro, con piezas de los siglos XIV hasta el XIX. En la construcción civil sobresale la Casa Fuerte y, junto a ella, una antigua fortaleza del siglo XVI desde donde parte el sendero que recorre el espacio natural de Barranco del Infierno, uno de las excursiones más valoradas de la Isla. El sendero, al estar en zona protegida, es de acceso restringido.
ARONA
El centro histórico del municipio sureño de Arona se extiende alrededor de la iglesia de San Antonio Abad, que data de finales del siglo XVIII, aunque la ermita originaria había sido construida en el siglo anterior. En su interior, la imagen más venerada es la del Cristo de la Salud, de la reconocida escuela canaria. Las antiguas casonas señoriales de típica arquitectura local y sus calles empedradas mantienen el encanto de lo tradicional.
CANDELARIA
Candelaria se encuentra en la cara sureste de Tenerife, a unos 17 kilómetros de Santa Cruz, la capital. La villa es conocida en toda Canarias por albergar en su Basílica la imagen de la Virgen de Candelaria, Patrona General del Archipiélago, hecho que genera cada año la visita de más de dos millones de personas. Conocida como la Villa Mariana, Candelaria tiene una población próxima a los 17.000 habitantes. Las calles de esta localidad costera, de gran tradición marinera y sabor popular, han sabido adaptarse a los nuevos tiempos sin perder su carácter más auténtico, combinando con naturalidad y maestría tradición y actualidad. Así, es posible encontrar rincones pintorescos y hermosos, muy próximos a centros comerciales y de ocio muy modernos.
Localidad de profundas raíces históricas, Candelaria ofrece a sus visitantes una excelente gastronomía marinera y un entorno agradable al que contribuye sin duda el carácter amable y acogedor de su gente, que se hace aún más evidente durante la celebración de sus fiestas patronales de Santa Ana y el Carmen, en julio, y las que se celebran en agosto en honor de la Virgen de Candelaria.
Sus playas, de arena oscura y evidente origen volcánico, contrasta con el verdor de sus montes. Los pueblos de Araya, Barranco Hondo, Cuevecitas, Igueste, Las Caletillas y Playa la Viuda merecen una visita.
El monumento más popular de la población es sin duda la Basílica de la Virgen de la Candelaria.
Al finalizar el siglo XIV, por tanto unos cien años antes de que se produjera la conquista de Tenerife, apareció en las costas del valle de Güímar una talla gótica de la Virgen de la Candelaria, imagen a la que los guanches rindieron culto con el nombre de Chaxiraxi. Desde el año 1526 la imagen permaneció en el santuario que se construyó bajo las órdenes del segundo Adelantado, Pedro Fernández de Lugo. Esta primitiva imagen desapareció a causa de un aluvión en 1826, la talla actual es obra del tinerfeño Fernando Estévez, quien la realizó en 1827.
La basílica es obra del arquitecto Enrique Marrero Regalado, edificada en 1959 gracias a la iniciativa del obispo de Tenerife, Domingo Pérez Cáceres, natural de Güímar. De estilo regionalista, se estructura en tres naves, con techumbre que imita el estilo mudéjar y una cúpula de 25 metros de altura coronando su crucero. Sobresale la torre central de 45 metros, que luce un balcón canario. La capilla mayor guarda la imagen de la Virgen de Candelaria proclamada en 1599 por el Papa Clemente VIII Patrona del archipiélago canario, título ratificado en 1867 por Pío IX. En su interior hay murales de José Aguiar y obras del pintor Martín González; otras obras son: el Cristo de la Reconciliación; una custodia barroca labrada en Canarias en el s. XVIII , y una pila bautismal de gran valor histórico perteneciente al s. XVI.
Aunque la festividad litúrgica de Nuestra Señora de la Candelaria tiene lugar el 2 de Febrero, el 15 de Agosto se celebra su aparición. Entonces, acuden en peregrinación gentes de toda la Isla. Junto a la Basílica se encuentra la Fuente de los Peregrinos. Al lado de la Basílica se alza el convento de los dominicos, construido en 1803 tras sufrir un incendio el primitivo convento.
El convento está regentado por los dominicos, que desde 1530 son los capellanes de la Candelaria. Una vez rebasado el convento se llega a la Cueva de Achbinico o de San Blas, donde los guanches colocaron a su Virgen, cuya importancia arqueológica está demostrada. Junto a la Plaza de la Patrona de Canarias se levantan los nueve menceyes guanches, del escultor tinerfeño José Abad, piezas escultóricas en bronce de gran tamaño.
GARACHICO
Candelaria se encuentra en la cara sureste de Tenerife, a unos 17 kilómetros de Santa Cruz, la capital. La villa es conocida en toda Canarias por albergar en su Basílica la imagen de la Virgen de Candelaria, Patrona General del Archipiélago, hecho que genera cada año la visita de más de dos millones de personas. Conocida como la Villa Mariana, Candelaria tiene una población próxima a los 17.000 habitantes. Las calles de esta localidad costera, de gran tradición marinera y sabor popular, han sabido adaptarse a los nuevos tiempos sin perder su carácter más auténtico, combinando con naturalidad y maestría tradición y actualidad. Así, es posible encontrar rincones pintorescos y hermosos, muy próximos a centros comerciales y de ocio muy modernos.
Localidad de profundas raíces históricas, Candelaria ofrece a sus visitantes una excelente gastronomía marinera y un entorno agradable al que contribuye sin duda el carácter amable y acogedor de su gente, que se hace aún más evidente durante la celebración de sus fiestas patronales de Santa Ana y el Carmen, en julio, y las que se celebran en agosto en honor de la Virgen de Candelaria.
Sus playas, de arena oscura y evidente origen volcánico, contrasta con el verdor de sus montes. Los pueblos de Araya, Barranco Hondo, Cuevecitas, Igueste, Las Caletillas y Playa la Viuda merecen una visita.
El monumento más popular de la población es sin duda la Basílica de la Virgen de la Candelaria.
Al finalizar el siglo XIV, por tanto unos cien años antes de que se produjera la conquista de Tenerife, apareció en las costas del valle de Güímar una talla gótica de la Virgen de la Candelaria, imagen a la que los guanches rindieron culto con el nombre de Chaxiraxi. Desde el año 1526 la imagen permaneció en el santuario que se construyó bajo las órdenes del segundo Adelantado, Pedro Fernández de Lugo. Esta primitiva imagen desapareció a causa de un aluvión en 1826, la talla actual es obra del tinerfeño Fernando Estévez, quien la realizó en 1827.
La basílica es obra del arquitecto Enrique Marrero Regalado, edificada en 1959 gracias a la iniciativa del obispo de Tenerife, Domingo Pérez Cáceres, natural de Güímar. De estilo regionalista, se estructura en tres naves, con techumbre que imita el estilo mudéjar y una cúpula de 25 metros de altura coronando su crucero. Sobresale la torre central de 45 metros, que luce un balcón canario. La capilla mayor guarda la imagen de la Virgen de Candelaria proclamada en 1599 por el Papa Clemente VIII Patrona del archipiélago canario, título ratificado en 1867 por Pío IX. En su interior hay murales de José Aguiar y obras del pintor Martín González; otras obras son: el Cristo de la Reconciliación; una custodia barroca labrada en Canarias en el s. XVIII , y una pila bautismal de gran valor histórico perteneciente al s. XVI.
Aunque la festividad litúrgica de Nuestra Señora de la Candelaria tiene lugar el 2 de Febrero, el 15 de Agosto se celebra su aparición. Entonces, acuden en peregrinación gentes de toda la Isla. Junto a la Basílica se encuentra la Fuente de los Peregrinos. Al lado de la Basílica se alza el convento de los dominicos, construido en 1803 tras sufrir un incendio el primitivo convento.
El convento está regentado por los dominicos, que desde 1530 son los capellanes de la Candelaria. Una vez rebasado el convento se llega a la Cueva de Achbinico o de San Blas, donde los guanches colocaron a su Virgen, cuya importancia arqueológica está demostrada. Junto a la Plaza de la Patrona de Canarias se levantan los nueve menceyes guanches, del escultor tinerfeño José Abad, piezas escultóricas en bronce de gran tamaño.
GARACHICO
La Villa y Puerto de Garachico, fundada por el genovés Cristóbal de Ponte en 1496, guarda celosamente las muestras de su brillante pasado en casonas, conventos e iglesias de la mejor arquitectura. Garachico, declarado como Bien de Interés Cultural con la categoría de Conjunto Histórico, cuenta con edificios tan interesantes como la Ermita de San Roque, el ex convento de Santo Domingo de Guzmán, el antiguo convento de San Francisco o la Hacienda de El Lamero. Pero las muestras de su impresionante arquitectura van más allá. La Casa de los Marqueses de la Quinta Roja, la Casa de Piedra o la de los Condes de La Gomera; el Parque de la Antigua Puerta de Tierra, la iglesia Matriz de Santa Ana o el Castillo de San Miguel -declarado Bien de Interés Cultural con categoría de Monumento-, se añaden a una oferta que se completa con lugares ideales para el encuentro y el sosiego, tales como las plazas de la Libertad y la de Abajo, o la de Las Lonjas, también conocida con el nombre de Juan González de la Torre.
GRANADILLA DE ABONA
El centro histórico del municipio de Granadilla de Abona, en el sur de Tenerife, se encuentra enmarcado por dos históricos edificios: la Iglesia de San Antonio de Padua y el Convento franciscano de San Luis.
La Parroquia de San Antonio de Padua se terminó en el siglo XVII, pero fue reconstruida cien años después al convertirse en ruinas a consecuencia de un incendio. En su artesonado se puede apreciar una clara influencia barroca dentro de la arquitectura canaria y mudéjar. Conserva unos magníficos retablos y tallas, además de destacadas muestras de imaginería de la escuela canaria. De la riqueza de su orfebrería destacan una diadema de oro de San Antonio, una concha de plata para el bautismo y una cruz procesal.
El Convento franciscano de San Luis Obispo, del siglo XVII, se destruyó en un incendio en el año 1745. Casi un siglo más tarde, tras ser clausurado por los monjes, pasó a ser sede del Ayuntamiento. En 1963, este emblemático edificio se derrumbó, provocando la muerte de 23 personas. Años más tarde volvió a incendiarse, tras lo que fue rehabilitado por el Cabildo y declarado Monumento Histórico-Artístico.
Dentro del casco histórico de Granadilla de Abona encontramos también el Museo de Historia, que ofrece al visitante un detallado recorrido en el tiempo. En sus diversas salas pueden contemplarse objetos del municipio que representan fehacientemente la vida, labores y costumbres de los aborígenes del Menceyato de Abona. De gran valor es también la sala dedicada a los antiguos ritos funerarios.
ICOD DE LOS VINOS
Desde el noroeste de Tenerife, Icod de los Vinos se abre al visitante para sorprenderle con un territorio plagado de diferentes y hermosos rincones naturales, que se inician en el mismo Teide y descienden hasta la playa de San Marcos, cubierta de una fina y brillante arena negra.
El tubo volcánico más grande de cuantos han sido topografiados en el mundo, la llamada Cueva del Viento, es otro de sus atractivos naturales,de entre los que destaca por su imagen emblemática y por su porte el ya célebre Drago Milenario, símbolo de la ciudad e inspiración de pintores y poetas a través de la historia.
Icod de los Vinos, de exquisita producción vinícola y rico en plantaciones plataneras y hortofrutícolas, cuenta, además, con una interesante arquitectura civil y religiosa, herencia de su esplendoroso pasado. Son lugares para conocer la plaza de La Pila, el parque de Andrés de Lorenzo Cáceres, el ex convento franciscano del Espíritu Santo, la Iglesia Matriz de San Marcos y su Museo de Arte Sacro; las iglesias de Las Angustias y San Agustín, y un buen número de casas solariegas y ermitas repartidas por el municipio.
ICOD DE LOS VINOS
Desde el noroeste de Tenerife, Icod de los Vinos se abre al visitante para sorprenderle con un territorio plagado de diferentes y hermosos rincones naturales, que se inician en el mismo Teide y descienden hasta la playa de San Marcos, cubierta de una fina y brillante arena negra.
El tubo volcánico más grande de cuantos han sido topografiados en el mundo, la llamada Cueva del Viento, es otro de sus atractivos naturales,de entre los que destaca por su imagen emblemática y por su porte el ya célebre Drago Milenario, símbolo de la ciudad e inspiración de pintores y poetas a través de la historia.
Icod de los Vinos, de exquisita producción vinícola y rico en plantaciones plataneras y hortofrutícolas, cuenta, además, con una interesante arquitectura civil y religiosa, herencia de su esplendoroso pasado. Son lugares para conocer la plaza de La Pila, el parque de Andrés de Lorenzo Cáceres, el ex convento franciscano del Espíritu Santo, la Iglesia Matriz de San Marcos y su Museo de Arte Sacro; las iglesias de Las Angustias y San Agustín, y un buen número de casas solariegas y ermitas repartidas por el municipio.
Las fiestas tradicionales de Icod de los Vinos merecen ser vividas: la de los cestos y bollos, en Santa Bárbara; el baile del Tajaraste, en El Amparo o los hachitos de San Juan. Mención especial para la víspera de la fiesta de San Andrés con la bajada de las tablas.
LA LAGUNA
San Cristóbal de La Laguna, declarada Bien Cultural y Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, mantiene en un excelente grado de conservación su casco histórico de gran valor. Las calles del centro de La Laguna se hallan sembradas no sólo de importantes monumentos y edificios históricos, sino que es, además, un importante centro de actividad comercial, donde es posible adquirir recuerdos de su paso por la Isla, moda, vinos tinerfeños, artesanía canaria o productos gastronómicos típicos. Ciudad de importante tradición universitaria, ofrece, además, la animación y el peculiar ambiente de sus innumerables tascas.
Palacio Lercaro
Dirección:San Agustin, 22
En el número 22 de la calle de San Agustín, antigua calle Real, esquina a Tabares de Cala, se encuentra el Palacio Lercaro, magnífico vestigio de la presencia genovesa en Tenerife. Sus propietarios, importante familia de banqueros, retrasaron su incorporación a la expansión comercial atlántica y su consiguiente llegada al Archipiélago debido a su fuerte vinculación comercial con oriente, ocupados en la llamada ruta de las especias.
Santo Domingo de Guzman
Dirección:Plaza Santo Domingo
El primer adelantado de La Laguna, don Alonso Fernández de Lugo, cede el trece de mayo de 1522 a la orden dominica la ermita de San Miguel, para que alrededor de ella, el Padre Mendoza creara un convento con el nombre de San Miguel de los Ángeles.
Palacio de Nava
Dirección:Calle Nava y Grimón
Comenzando la calle Nava y Grimón, antigua calle del Aguay junto a la plaza del Adelantado, se levanta la casa de Nava sobre un solar que fue, a partir de 1500, de Jorge Grimón, conquistador de Tenerife
Casa Alvarado-Bracamonte y de los Capitanes
Dirección:Obispo Rey Redondo
Según el historiador Pedro Tarquis la casa fue edificada por el alarife Manuel de Penedo “el Viejo”, que fuentes documentales ubican en la Ciudad de los Adelantados en la primera mitad del siglo XVII. Se trata de un inmueble excepcional del que se desprende la categoría social de sus moradores, y al que las reformas y ampliaciones contemporáneas no han desmerecido, convirtiéndolo en uno de los exponentes más claros de la arquitectura doméstica de la época
Iglesia del Convento de San Juan Bautista. M.M Clarisas
Dirección:Calle de Ernesto Ascanio y León Huerta
El Monasterio de las monjas clarisas es el primer convento femenino que se funda en el Archipiélago canario, con cuatro monjas procedentes del Monasterio de San Antonio de Baeza y seis del Regina Coeli, de Sanlúcar de Barrameda
Iglesia del Convento de Santa Catalina de Siena
Dirección:plaza del adelantado
Los primeros datos que se poseen acerca del convento de Santa Catalina de Siena se remontan a la primera mitad del siglo XVI. En 1524 el Cabildo de Tenerife proyecta la fundación de un monasterio de religiosas en los terrenos que el Adelantado y el Cabildo habían destinado a los monjes dominicos
Real Santuario del Cristo
Dirección:Plaza del Cristo
El convento franciscano de San Miguel de Las Victorias fue fundado por el Adelantado una vez finalizada la Conquista. Su advocación, al arcángel San Miguel simboliza la victoria; siempre asociado a la lucha y triunfo del bien sobre el mal y como redención de las almas por el cristianismo
Casas Consistoriales
Dirección:Obispo Rey Redodo, 1
Ubicadas frente a la Plaza del Adelantado y haciendo esquina con la calle Obispo Rey Redondo se localizan las Casas Consistoriales, sede del antiguo Cabildo de la Isla
Ex- Convento de San Agustín.
Actual I.E.S.Canarias Cabrera Pinto
Es recomendable a la llegada ir hasta la Oficina de Turismo, allí muy amablemente os informarán de la ruta a seguir en vuestra visita, además tienen visitas guiadas con cierta regularidad, las mismas son ofrecidas de forma gratuita, aunque recomiendo darle una propina al guia.
Palacio Lercaro
Dirección:San Agustin, 22
En el número 22 de la calle de San Agustín, antigua calle Real, esquina a Tabares de Cala, se encuentra el Palacio Lercaro, magnífico vestigio de la presencia genovesa en Tenerife. Sus propietarios, importante familia de banqueros, retrasaron su incorporación a la expansión comercial atlántica y su consiguiente llegada al Archipiélago debido a su fuerte vinculación comercial con oriente, ocupados en la llamada ruta de las especias.
Santo Domingo de Guzman
Dirección:Plaza Santo Domingo
El primer adelantado de La Laguna, don Alonso Fernández de Lugo, cede el trece de mayo de 1522 a la orden dominica la ermita de San Miguel, para que alrededor de ella, el Padre Mendoza creara un convento con el nombre de San Miguel de los Ángeles.
Palacio de Nava
Dirección:Calle Nava y Grimón
Comenzando la calle Nava y Grimón, antigua calle del Aguay junto a la plaza del Adelantado, se levanta la casa de Nava sobre un solar que fue, a partir de 1500, de Jorge Grimón, conquistador de Tenerife
Casa Alvarado-Bracamonte y de los Capitanes
Dirección:Obispo Rey Redondo
Según el historiador Pedro Tarquis la casa fue edificada por el alarife Manuel de Penedo “el Viejo”, que fuentes documentales ubican en la Ciudad de los Adelantados en la primera mitad del siglo XVII. Se trata de un inmueble excepcional del que se desprende la categoría social de sus moradores, y al que las reformas y ampliaciones contemporáneas no han desmerecido, convirtiéndolo en uno de los exponentes más claros de la arquitectura doméstica de la época
Iglesia del Convento de San Juan Bautista. M.M Clarisas
Dirección:Calle de Ernesto Ascanio y León Huerta
El Monasterio de las monjas clarisas es el primer convento femenino que se funda en el Archipiélago canario, con cuatro monjas procedentes del Monasterio de San Antonio de Baeza y seis del Regina Coeli, de Sanlúcar de Barrameda
Dirección:plaza del adelantado
Los primeros datos que se poseen acerca del convento de Santa Catalina de Siena se remontan a la primera mitad del siglo XVI. En 1524 el Cabildo de Tenerife proyecta la fundación de un monasterio de religiosas en los terrenos que el Adelantado y el Cabildo habían destinado a los monjes dominicos
Real Santuario del Cristo
Dirección:Plaza del Cristo
El convento franciscano de San Miguel de Las Victorias fue fundado por el Adelantado una vez finalizada la Conquista. Su advocación, al arcángel San Miguel simboliza la victoria; siempre asociado a la lucha y triunfo del bien sobre el mal y como redención de las almas por el cristianismo
Casas Consistoriales
Dirección:Obispo Rey Redodo, 1
Ubicadas frente a la Plaza del Adelantado y haciendo esquina con la calle Obispo Rey Redondo se localizan las Casas Consistoriales, sede del antiguo Cabildo de la Isla
Ex- Convento de San Agustín.
Actual I.E.S.Canarias Cabrera Pinto
La Villa de la Orotava conserva un casco antiguo perfectamente delimitado, que cuenta con la declaración de Conjunto Histórico-artístico. En sus calles cuajadas de edificios de interés, se concentran obras dignas de ser admiradas, tales como la Ermita del Calvario, la Iglesia de San Agustín, la Plaza de la Constitución, la calle Carrera del Escultor Estévez, la iglesia de Santo Domingo o el ex convento de San Benito Abad, y por descontado la casa de los balcones, entre otros.
LOS GIGANTES
Los Gigantes es un impresionante destino de obligada visita situado en la costa oeste de Tenerife. Estos colosales acantilados se abalanzan sobre las cálidas aguas del Océano Atlántico desde una altura de 300 a 600 metros, una asombrosa visión difícil de olvidar. Además, es la principal atracción de este pueblo costero, muy popular para dar una excursión de un día. Aquí podrá apreciar la variedad de colores y texturas de estos sobrecogedores acantilados, que han dado nombre a la localidad.
Estos espectaculares despeñaderos se pueden observar desde cualquier punto del pueblo, pero una de las mejores maneras de explorar su magnitud es de cerca. Podrá dar un paseo en uno de los numerosos barcos presentes en el sofisticado puerto deportivo, donde encontrará también una buena selección de restaurantes y bares con estupendas vistas a las aguas cristalinas, además de una excelente gastronomía.
Mi recomendación es "El Rincón de Antonio", al final del puerto, calidad y un excelente servicio.
Asimismo, existen otros lugares a un paso del mencionado puerto deportivo donde saborear y degustar platos típicos canarios y refrescarse con una bebida cerca de la Playa de los Gigantes, de arenas volcánicas.
El puerto es quizás el único lugar donde se puede aparcar, y allí encontraremos todas las empresas que alquilan embarcaciones o realizan paseos por la zona.
Si vuestro propósito es tomar el sol, os recomiendo las dos piscinas privadas que hay subiendo desde el puerto, una a escasos 50 metros y la otra a unos 200, quizás esta última está en mejores condiciones, el importe para usar la piscina, vestuarios y hamacas está sobre los 4 euros, la entrada es gratuita si comes en el restaurante, sólo tendrás que pagar la hamaca.
PARQUE RURAL DE ANAGA
Esta es una zona que en anteriores viajes no habiamos visitado y, que nos sorprendio muy gratamente, ya que ofrece unos paisajes inéditos tanto en el archipielago canario como en la península, paisajes que más recuerdan a las selvas tropicales de América.
El Parque Rural de Anaga ocupa gran parte del macizo montañoso situado en el extremo nordeste de la Isla de Tenerife. Con una extensión de 14.419 hectáreas abarca una parte importante de la Isla de Tenerife y se ubica en parte de los municipios de La Laguna, Santa Cruz de Tenerife y Tegueste.
Se trata de un espacio abrupto con excepcionales valores naturales y culturales, que cuenta con paisajes de gran armonía y belleza, fruto de la coexistencia del ser humano y la naturaleza en un territorio agreste.
Hoy constituye una de las principales áreas de esparcimiento del área capitalina de Tenerife y es también un gran atractivo turístico, lo que ha de servir para ayudar a preservar su población y su cultura local y mejorar sus condiciones de vida.
Los principales accesos son a través de la carretera por las Mercedes, desde La Laguna, y por San Andrés, también por la carretera, desde Santa Cruz, nosotros lo realizamos tras una mañana de playa en Las Teresitas. Se puede acceder en vehículo particular o en guagua, hay que tener en cuenta que la carretera es abrupta y llena de curvas.
El Parque de Anaga tiene una interesante red de carreteras y de senderos que nos pueden acercar a lugares con excelentes panorámicas, rincones naturales de belleza espectacular o conocer sus numerosos y pintorescos caseríos.
LOS GIGANTES
Los Gigantes es un impresionante destino de obligada visita situado en la costa oeste de Tenerife. Estos colosales acantilados se abalanzan sobre las cálidas aguas del Océano Atlántico desde una altura de 300 a 600 metros, una asombrosa visión difícil de olvidar. Además, es la principal atracción de este pueblo costero, muy popular para dar una excursión de un día. Aquí podrá apreciar la variedad de colores y texturas de estos sobrecogedores acantilados, que han dado nombre a la localidad.
Estos espectaculares despeñaderos se pueden observar desde cualquier punto del pueblo, pero una de las mejores maneras de explorar su magnitud es de cerca. Podrá dar un paseo en uno de los numerosos barcos presentes en el sofisticado puerto deportivo, donde encontrará también una buena selección de restaurantes y bares con estupendas vistas a las aguas cristalinas, además de una excelente gastronomía.
Mi recomendación es "El Rincón de Antonio", al final del puerto, calidad y un excelente servicio.
Asimismo, existen otros lugares a un paso del mencionado puerto deportivo donde saborear y degustar platos típicos canarios y refrescarse con una bebida cerca de la Playa de los Gigantes, de arenas volcánicas.
El puerto es quizás el único lugar donde se puede aparcar, y allí encontraremos todas las empresas que alquilan embarcaciones o realizan paseos por la zona.
Si vuestro propósito es tomar el sol, os recomiendo las dos piscinas privadas que hay subiendo desde el puerto, una a escasos 50 metros y la otra a unos 200, quizás esta última está en mejores condiciones, el importe para usar la piscina, vestuarios y hamacas está sobre los 4 euros, la entrada es gratuita si comes en el restaurante, sólo tendrás que pagar la hamaca.
PARQUE RURAL DE ANAGA
Esta es una zona que en anteriores viajes no habiamos visitado y, que nos sorprendio muy gratamente, ya que ofrece unos paisajes inéditos tanto en el archipielago canario como en la península, paisajes que más recuerdan a las selvas tropicales de América.
El Parque Rural de Anaga ocupa gran parte del macizo montañoso situado en el extremo nordeste de la Isla de Tenerife. Con una extensión de 14.419 hectáreas abarca una parte importante de la Isla de Tenerife y se ubica en parte de los municipios de La Laguna, Santa Cruz de Tenerife y Tegueste.
Se trata de un espacio abrupto con excepcionales valores naturales y culturales, que cuenta con paisajes de gran armonía y belleza, fruto de la coexistencia del ser humano y la naturaleza en un territorio agreste.
Hoy constituye una de las principales áreas de esparcimiento del área capitalina de Tenerife y es también un gran atractivo turístico, lo que ha de servir para ayudar a preservar su población y su cultura local y mejorar sus condiciones de vida.
Los principales accesos son a través de la carretera por las Mercedes, desde La Laguna, y por San Andrés, también por la carretera, desde Santa Cruz, nosotros lo realizamos tras una mañana de playa en Las Teresitas. Se puede acceder en vehículo particular o en guagua, hay que tener en cuenta que la carretera es abrupta y llena de curvas.
El Parque de Anaga tiene una interesante red de carreteras y de senderos que nos pueden acercar a lugares con excelentes panorámicas, rincones naturales de belleza espectacular o conocer sus numerosos y pintorescos caseríos.
Anaga ofrece un paisaje espectacular y una gran diversidad natural,
resultado de la propia orografía, y por la existencia de diferentes
ambientes, que van desde el más húmedo y lluvioso en las partes altas
hasta aquellos de elevada insolación y escasa pluviometría.
Esta diversidad de ambientes favorece el asentamiento de una rica y diversa naturaleza, un abanico de comunidades que alberga numerosas especies animales y vegetales, con más de 120 endemismos locales, algunos de ellos muy escasos y amenazados.
Entre los hábitats naturales de Anaga se encuentran algunas de las mejores manifestaciones de los ecosistemas canarios. Destacan por su buen estado de conservación los bosques de laurisilva de sus cumbres, los sabinares como el de Afur o los cardonales tabaibales del extremo oriental del macizo.
Las poblaciones que nosotros visitamos (no disponiamos de mucho tiempo), están Taganana un pintoresco caserío al que accedirmos desde San
Andrés, una pequeña localidad pesquera situada junto a la playa de Las Teresitas.
Enclavado en un pequeño y escarpado
valle, Taganana, como el resto de caseríos de Anaga, conserva las
costumbres y la arquitectura del pasado de la Isla.
Entre su reducido número de edificaciones, Taganana conserva un templo dedicado a Nuestra Señora de las Nieves, uno de los más antiguos de la Isla, en cuyo interior permanece un auténtico tesoro artístico, un valioso tríptico de la escuela flamenca del siglo XVI. En el entorno del caserío, la riqueza natural del macizo de Anaga muestra su magnífica belleza en forma de frondosos bosques de laurisilva, playas prácticamente vírgenes y roques espectaculares.
El centro histórico de Puerto de la Cruz, declarado Conjunto Histórico Artístico en 1985, conjuga la riqueza histórica y todo el sabor del que fue, hasta el siglo XVIII, puerto de la Villa de La Orotava. La localidad mantiene la animación y pujanza del importante centro turístico que es hoy y que fue también desde el siglo XIX, cuando era uno de los destinos turísticos pioneros en España y en toda Europa. Historia y modernidad se funden en un municipio de tradiciones marineras.
En torno a la céntrica y siempre concurrida plaza de El Charco, las calles peatonales acercan al curioso hasta edificios de gran valor histórico como la Casa de la Aduana, la Casa Miranda, el hotel Marquesa, la iglesia de la Peña de Francia y la ermita de San Telmo. Junto al muelle está, igualmente, el encantador barrio pesquero de La Ranilla. Algo más lejos se sitúa el Jardín Botánico, creado en el siglo XVII para la aclimatación de las especies vegetales traídas desde América, África y Asia.
Si el tiempo acompaña, algo no muy frecuente en la zona situada al norte de las montañas que parten la isla, hay que tomarse un baño en las piscinas y charcos Martiánez.
El complejo municipal de Costa Martiánez, orgullo del Puerto de la Cruz, es uno de los más admirados ejemplos de transformación de un litoral. Un prestigioso equipo técnico, dirigido por el renombrado artista lanzaroteño César Manrique, realizó esta singular obra adaptada a la arquitectura tradicional canaria y complementada con elementos vegetales de flora autóctona y originales esculturas.
Su lago artificial, con unos 27.000 metros cúbicos de agua de mar, realza las otras cuatro piscinas para adultos y tres infantiles, todas ellas de original trazado y belleza. Una variada gama de bares, restaurantes y kioscos dota al complejo de una especial vitalidad y lo convierten en uno de los centros más llamativos de toda la isla.
Si el tiempo acompaña, algo no muy frecuente en la zona situada al norte de las montañas que parten la isla, hay que tomarse un baño en las piscinas y charcos Martiánez.
El complejo municipal de Costa Martiánez, orgullo del Puerto de la Cruz, es uno de los más admirados ejemplos de transformación de un litoral. Un prestigioso equipo técnico, dirigido por el renombrado artista lanzaroteño César Manrique, realizó esta singular obra adaptada a la arquitectura tradicional canaria y complementada con elementos vegetales de flora autóctona y originales esculturas.
Su lago artificial, con unos 27.000 metros cúbicos de agua de mar, realza las otras cuatro piscinas para adultos y tres infantiles, todas ellas de original trazado y belleza. Una variada gama de bares, restaurantes y kioscos dota al complejo de una especial vitalidad y lo convierten en uno de los centros más llamativos de toda la isla.
SANTA CRUZ DE TENERIFE
Santa Cruz de Tenerife es la capital de la mayor de las siete islas que componen el Archipiélago Canario, situadas cerca de la costa Occidental del Norte de África, recibiendo también su nombre una de las dos Provincias en la que está dividida la Comunidad Canaria.
El municipio de Santa Cruz de Tenerife tiene una extensión de 151 Km2, que ocupa una amplia zona del Noreste Tinerfeño, su altitud va desde el nivel del mar hasta los aproximadamente 750 metros de la cima del término municipal, en tanto que conforma un crisol de microclimas y paisajes de lo más variado.
El casco histórico de Santa Cruz de Tenerife, capital de la Isla, está situado en la parte de la ciudad más cercana al mar, junto a su importante puerto comercial. Aquí, entre calles peatonales colmadas de tiendas, restaurantes y otros establecimientos, numerosos edificios testimonian el devenir histórico de la ciudad. Un ejemplo es la iglesia de la Concepción, cuya primera construcción data de 1500, aunque fue reconstruida en 1653.
En torno a esta iglesia giraba el núcleo original de Santa Cruz, que hasta 1859 fue sólo el puerto de la vecina ciudad de San Cristóbal de La Laguna. Hoy la cercana calle de La Noria acoge un gran ambiente nocturno con sus casas tradicionales ocupadas por bares y tascas. La iglesia de San Francisco, la plaza Príncipe de Asturias, la plaza de La Candelaria o el mercado municipal de Nuestra Señora de África son algunas de las paradas obligadas durante un recorrido por esta zona urbana donde lo antiguo y lo contemporáneo se confunden.
Iglesia Nuestra Señora de La Concepción
La estructura actual pertenece pues a los s. XVII y XVIII, consta de cinco naves, con planta de cruz latina y estructura arquitectónica toscana, con el sello de la estética colonial canaria.
Sus elementos más antiguos son la pequeña imagen gótica de la Virgen de Consolación, a quien el conquistador Fernández de Lugo erigió una ermita en 1496, y la Cruz de la Conquista, bajada a tierra por el citado militar en el momento de su desembarco, en el año 1494.
Antiguo Hospital Civil Nuestra Señora de los Desamparados
En cuanto a los edificios de carácter público del Siglo XVIII que todavía se conservan en la ciudad, cuentan con el Hospital Civil de los Desamparados, ubicado en el margen derecho del Barranco de Santos. La fachada del edificio es uno de los mejores exponentes de la arquitectura neoclásica en Canarias. Hoy en día este edificio alberga el Museo de la Naturaleza y el Hombre.
Palacio de Carta
Tal vez el lugar más conocido de Santa Cruz durante el Siglo XVIII. Situado en la plaza de La Candelaria, fue mandado a construir en 1721 por Matías Rodríguez Carta, quedando terminado en 1752. En el interior, cuenta con dos patios de estilo tradicional canario. Fue sede del Gobierno Civil y más tarde oficina principal de un banco. Es el primer inmueble designado Bien de Interés Cultural de Santa Cruz y uno de los primeros de Canarias.
Antiguo Convento Franciscano e Iglesia de San Francisco
La existencia en Santa Cruz de dos conventos es algo que hoy podría sorprender. El único rasgo que ha perdurado de estas dos fundaciones es la magnífica iglesia de San Francisco, perteneciente al antiguo convento franciscano. La fachada actual de la iglesia de San Francisco data aproximadamente del año 1777. En su interior destaca el retablo central considerado como una joya del barroco en Canarias.
Alameda del Duque de Santa Elena
Fue construida en 1797 por orden del comandante general de Canarias, Marqués de Branciforme, y gracias a la suscripción popular. Era el lugar de paseo de las familias santacruceras, y era un auténtico balcón al mar, desde el que se pudo contemplar la llegada de personas al puerto capitalino. Una de las visitas más ilustres que se recuerdan fue la del rey Alfonso XIII.
El entorno ha sido restaurado recientemente siguiendo el proyecto de los arquitectos suizos Herzog & De Meuron. La obra ha incluido la reconstrucción de una réplica del pórtico de La Alamenda, a imagen del original.
Cuartel de Almeida
La obra de este cuartel finaliza en 1884, por entonces ya no tenía valor militar, debido a las mejoras en las técnicas artilleras y el crecimiento de la población, que lo había englobado. Sirvió como sede del Regimiento de Artillería. Durante su historia, el cuartel sufre diversas remodelaciones hasta que en 1940 se desartilla y pasa a convertirse en el actual Museo Militar Regional de Canarias. Actualmente el museo cuenta con distintas piezas, entre las cuales están:
• El cañón “Tigre”, conocido porque la metralla de uno de sus cañonazos provocó diversas heridas en el brazo de el Almirante Horacio Nelson.
• El cañón “Hércules”.
Sus fondos hacen de este museo uno de los más importantes centros de investigación de Canarias en lo que a cartografía histórica se refiere. El espectador también puede contemplar una parte del conjunto de las armas utilizadas en los enfrentamientos por la Conquista de Tenerife.
Castillo de San Juan
El flanco sur de la ciudad estuvo durante siglos resguardado y defendido por el Castillo de San Juan Bautista. Su construcción data del año 1644, en el lugar conocido en la época como La Caleta de Negros.
Más de tres siglos y medio después, el 'Castillo Negro' -como se conoce popularmente- es una de las escasas fortificaciones que se convservan en Santa Cruz y, por tanto, uno visita turísitca obligada.
Ermita de Nuestra Señora de Regla
Localizada en las afueras de la ciudad por la zona sur, se le denominó popularmente de La Regla, sirviendo durante muchos años como capilla a la guarnición del Castillo de San Juan que se encuentra en las inmediaciones.
Casa de la Pólvora
Se trata de otra de las construcciones defensivas con las que cuenta Santa Cruz. Construida entre 1756 y 1758 en las proximidades del Castillo de San Juan.
El antiguo Santa Cruz
En este conjunto está comprendido el núcleo fundacional de la ciudad. A través de sus construcciones y trazado puede rastrearse su evolución urbana desde el Antiguo Régimen hasta nuestros días. El repertorio edificatorio, variado y de gran interés, reúne arquitecturas propias del XVIII hasta la actualidad. Del conjunto cabe destacar La Plaza de la Iglesia, el primer espacio público de la ciudad. En ella la Iglesia de Nuestra Señora de La Concepción, es un ejemplo de tradición mudéjar que aúna actuaciones propias del XVII (naves del Evangelio y de la Epístola) y del XIX (remate de la torre).
Frente al templo y al otro lado del barranco el Antiguo Hospital Civil, hoy Museo de la Naturaleza y el Hombre, es un ejemplo de la arquitectura hospitalaria del XIX. Con origen en una institución fundada en 1745 por los hermanos Lochman Van Udeen, adquirió el carácter de arquitectura hospitalaria con la intervención en 1863 del arquitecto Manuel de Oráa. El edificio conoció ampliaciones en: 1919 por Antonio Pintor, y las de las décadas de los 40 y 50 por Manuel Regalado y Tomás Machado, respectivamente.
Ejemplos de arquitectura tradicional pueden ser encontrados en las calles Domínguez Alfonso, Candelaria, Cruz Verde y Plaza de la Iglesia. Ejemplos de arquitectura clasicista, de comienzos del siglo XX, en la calle de Santo Domingo. Ejemplos de arquitectura ecléctica (XIX-XX) en las calles: El Sol, Cruz Verde, Castillo, Nicolás Estévanez, San Pedro Alcántara y La Palma.
En el límite del centro histórico, colindante con la Plaza de La Candelaria, también de gran interés, cabe destacar: la Casa Simón de lenguaje historicista (Antonio Pintor, 1930), y el Círculo Mercantil de lenguaje ecléctico (Enrique Marrero Regalado, 1932). En la calle Castillo nº 2 destaca como ejemplo de arquitectura racionalista la casa Palazón (Miguel Martín Fernández de la Torre, 1930).
Otro de los conjuntos de interés se ordena en torno a la Plaza Isla de La Madera, ejemplo de trazado urbano del XIX, obra del arquitecto Manuel de Oráa, autor también de dos obras civiles de gran importancia en la ciudad: el teatro y el mercado. El Teatro Guimerá, inaugurado en 1851 es el edificio más emblemático del Santa Cruz del siglo XIX. El antiguo mercado fue proyectado en 1847 y en su diseño el arquitecto aunó sobriedad y funcionalidad.
Barrio de los hoteles-Pino de Oro
El Barrio de los Hoteles forma un cuadrilátero irregular entre la Rambla de Santa Cruz y la calle Méndez Núñez, por un lado, y las calles Robayna y Numancia, por otro, con centro en la plaza 25 de julio. Es el ensanche de la ciudad en el siglo XIX, concebido como un conjunto residencial en cuyo trazado se sigue la tipología urbana de ciudad jardín. La rapidez y uniformidad de su construcción, acometida en las últimas décadas de aquel siglo, favoreció la creación de un conjunto homogéneo de viviendas. En él, se puede rastrear la arquitectura de autor, las arquitecturas eclécticas, historicistas, de: Estanga, Cámara, Pintor; las racionalistas de: Pisaca, Blasco, Marrero Regalado y Fernández de la Torre.
El espacio se ordena en varios núcleos bien diferenciados. El triángulo comprendido entre la Rambla de Santa Cruz-José Navieras-Rambla 25 de julio contiene el mejor racionalismo de Domingo Pisaca -calles Martín Bencomo y Enrique Wolfson-. El Parque García Sanabria alberga una buena muestra de escultura contemporánea, perteneciente a la I Exposición Internacional de Escultura en la Calle celebrada en la ciudad en 1973. En su lateral de la calle Numancia hay dos buenos ejemplos de arquitectura modernista de Mariano Estanga (casas del girasol y de la ondina).
En el eje de la Rambla 25 de julio se alinean algunos de los mejores ejemplos de la arquitectura ecléctica. De especial interés es el entorno de la plaza de los Patos, con las arquitecturas eclécticas y modernistas de Mariano Estanga (Edificio Roma, la antigua farmacia Castelo, Palacete Martí Dehesa) y la iglesia de San Jorge, en lenguaje historicista. De especial interés son las arquitecturas de la calle Jesús y María. Entre los edificios singulares de este área destacan, las Casas Consistoriales de la ciudad (Pintor, 1898) y el edificio de la Fundación Villasegura (Cámara, 1909).
La Rambla 25 de julio conduce a la Plaza Weyler, urbanizada a partir de 1881, tiene en su centro una fuente de mármol obra del escultor genovés Achille Canessa. Este espacio lo delimitan las dependencias militares del antiguo gobierno militar -25 de Julio-Juan Pablo II- (Vallabriga, 1928), y un ejemplo de clasicismo romántico en la sede de la actual Capitanía General de Canarias (Tomás Clavijo, 1878).
Barrio del Toscal
Este barrio nació al amparo del desarrollo portuario en el siglo XIX y comienzos del XX. En él se ubicaban las compañías consignatarias ligadas al puerto, las casas de comercio y almacenes.
Delimitado entre la calle Méndez Núñez, el cuartel de Almeida y la calle de La Marina, el conjunto se alinea sobre tres ejes principales: la calle de la Rosa, la de Santiago y la de San Miguel. Ésta se secciona por vías perpendiculares: San Francisco Javier, San Antonio, San Martín y Señor de las Tribulaciones. En ellas el tipo edificatorio característico es el de la casa terrera, es decir, viviendas humildes de una sola planta, con esquemas de fachadas muy sencillas. Ejemplos de este tipo de viviendas se pueden apreciar en la calle Santiago (Antonio Pintor) y en los Pasajes de Pisaca, 1ª y 2ª de Ravina, donde para albergar a las clases más modestas se construyeron las denominadas ciudadelas.
Entre los inmuebles singulares del barrio destacan: El Colegio Onésimo Redondo (Antonio Pintor, 1891), la Casa Pisaca (Federico Sole, 1901), el Hogar Escuela María Auxiliadora (Domingo Pisca, 1939) ejemplo de arquitectura racionalista, y un ejemplo de arquitectura modernista -La Rosa-Santa Rosalía- (Mariano Estanga, 1904).
Barrio de La Concepción
Situado en la parte de la ciudad más cercana al mar, junto a su importante puerto comercial. Entre sus calles peatonales donde actualmente se ubican restaurantes, locales de ensayo de grupos del carnaval y sedes de instituciones varias, numerosos edificios testimonian el devenir histórico de la ciudad. Un ejemplo es la iglesia de la Concepción, cuya primera construcción data de 1500, aunque fue reconstruida en 1653. En su interior se puede visitar la imagen de la Virgen de la Consolación (Siglo XV). En torno a esta iglesia giraba el núcleo original de Santa Cruz, que hasta 1859 fue sólo el puerto de la vecina ciudad de San Cristóbal de La Laguna.
Justo frente al puerto encontramos la plaza España, primer lugar donde podemos tomar un café, especialmente aquellos que están llegando en un barco de crucero.
Justo frente al puerto encontramos la plaza España, primer lugar donde podemos tomar un café, especialmente aquellos que están llegando en un barco de crucero.
PLAYA DE LAS TERESITAS
San Andrés
Es la playa más conocida y turística de la ciudad de Santa Cruz. Se encuentra a una distancia de 7 km. del centro de la ciudad. Tiene aproximadamente un kilómetro y medio de paseo de arena dorada y fina, y esta protegida de las corrientes y oleaje por una escollera por lo que es ideal para niños. Ofrece todo tipo de equipamientos y un gran número de servicios hosteleros (restaurantes y cafeterías).
Es sin lugar a dudas la mejor playa para aquellos que estamos acostumbrados a las playas de arenas doradas, con algo más de kilómetro y medio de arena, dentro de un arrecife artificial, la playa dispone de duchas, vestuarios y baños, totalmente gratuitos, divididos por toda la playa, además de contar con un amplio parking, también gratuito.
Encontramos a lo largo de la playa varios chiringuitos que nos ofrecen toda clase de bebidas, tapas o comidas, hamacas y sombrillas a un precio muy razonable.
Es sin lugar a dudas la mejor playa para aquellos que estamos acostumbrados a las playas de arenas doradas, con algo más de kilómetro y medio de arena, dentro de un arrecife artificial, la playa dispone de duchas, vestuarios y baños, totalmente gratuitos, divididos por toda la playa, además de contar con un amplio parking, también gratuito.
Encontramos a lo largo de la playa varios chiringuitos que nos ofrecen toda clase de bebidas, tapas o comidas, hamacas y sombrillas a un precio muy razonable.
Parque Marítimo César Manrique
El Parque marítimo César Manrique es un complejo de 22.000 metros cuadrados de piscinas de agua salada, obra póstuma del desaparecido artista lanzaroteño César Manrique, combinando la estética de la edificación con elementos de la naturaleza volcánica de Canarias y una clara esencia subtropical, como ya aplicó en su día en el complejo de similares características "Lago Martiánez" del Puerto de la Cruz en Tenerife.
Está ubicado en la costa de la zona Cabo Llanos de reciente modernización en la ciudad de Santa Cruz de Tenerife, junto al Castillo de San Juan y el emplazamiento del Auditorio de Tenerife.
Cuenta con servicios de restauración, vestuario, duchas, jacuzzi, hamacas y sombrillas, instalaciones de todo tipo que hacen del mismo el sitio ideal tanto para actividades turísticas o de ocio, celebraciones de eventos, etc.
PARQUE NACIONAL DEL TEIDE
Una red de parques nacionales en el archipiélago canario intenta conservar sus ecosistemas más característicos. Así, el Parque Nacional del Teide, situado en el centro de la isla de Tenerife, alberga la mejor manifestación de la vegetación del piso supramediterráneo. Por otro lado, con una altitud media superior a los 2.000 metros, el Parque Nacional del Teide nos ofrece una de las muestras más espectaculares del vulcanismo a nivel mundial y representa la mejor muestra de ecosistema volcánico de alta montaña de toda Canarias.
Geomorfológicamente, la estructura de la caldera y el estratovolcán Teide - Pico Viejo constituyen monumentos geológicos de los más espectaculares del mundo; además, la gran variedad de conos y domos volcánicos, coladas de lava, pitones y cuevas forman un extraordinario conjunto de colores y formas, acrecentando el interés científico y paisajístico de este área.
En cuanto a su gran riqueza biológica, destaca su singular flora con un alto porcentaje de endemismos y su fauna invertebrada con numerosas especies exclusivas. Este Parque Nacional, creado en 1954 en reconocimiento a su singularidad volcánica y biológica, es con sus 18.990 hectáreas el mayor y más antiguo de los Parques Nacionales de las Islas Canarias, ocupando el quinto lugar en cuanto a extensión superficial de los trece existentes en la Red de Parques Nacionales. Además de su Zona Periférica de Protección, este espacio natural está rodeado del Parque Natural de la Corona Forestal que, con 46.612,9 ha de extensión, es el mayor espacio natural protegido de toda la Comunidad Autónoma de Canarias.
En 1989 fue galardonado con el Diploma Europeo en su máxima categoría A que otorga el Consejo de Europa. Este Diploma Europeo ha sido prorrogado en el año 1994 y en 1999. El Patronato del Parque Nacional del Teide y la Comisión Mixta de Gestión de los Parques Nacionales en Canarias, en reuniones celebradas durante 2002, tomaron el acuerdo de la iniciativa de declaración del Parque Nacional del Teide como Patrimonio de la Humanidad. Fruto de dicha iniciativa el Parque Nacional del Teide ha sido declarado Patrimonio de la Humanidad en el verano de 2007.
El ascenso a la cumbre puede realizarse en teleférico o a pie.
Subir hasta la cumbre del Teide, la cima más alta de España con sus 3.718 metros, es una experiencia singular. La posibilidad de hacer parte del recorrido en teleférico permite la ascensión a casi cualquier persona, independientemente de su condición física. Los más aventureros pueden también acceder a la cumbre a pie a través de un sendero que parte de la zona de Montaña Blanca, junto a la carretera. Es el único camino permitido y su trazado, muy exigente, requiere casi seis horas de caminata El servicio de teleférico, que opera todos los días si las condiciones meteorológicas lo permiten, alcanza la zona de La Rambleta, a 3.555 metros de altitud. El resto de la ascensión, poco más de 200 metros, es necesario realizarla a pie. El camino que alcanza el pico (sendero Telesforo Bravo) es de acceso restringido por lo que hay que solicitar un permiso para subir hasta la cima, tanto si el recorrido se hace a pie o en teleférico.
Las subidas en teleférico a la estación terminal de La Rambleta comienzan a las 9 h y finalizan a las 16 h, salvo inclemencias del tiempo o fuerte viento que imposibiliten dicha subida. Se han establecido medidas restrictivas, NO permitiéndose el acceso desde la terminal al punto más elevado del cono, aunque sí en dirección a los miradores de La Fortaleza y de Pico Viejo, salvo que se disponga de un permiso especial Por lo tanto, para acceder desde La Rambleta o terminal del Teleférico hasta el Pico de Teide por el sendero "Telesforo Bravo" hay que tramitar con antelación un permiso que se otorga exclusivamente a través de la web www.reservasparquesnacionales.es , el cual tiene validez para UNA fecha y hora determinada. Para más información puede dirigirse a las oficinas del Parque:
(Se recomienda realizar la tramitación del permiso de acceso al sendero Telesforo Bravo lo antes posible, porque, debido a la gran demanda existente en la época estival, las plazas diarias se ocupan con bastante antelación)
En ningún caso se permite el acceso al cráter. Los otros dos senderos que parten desde La Rambleta en dirección a los miradores de Pico Viejo y de La Fortaleza, y que ofrecen excelentes vistas de Las Cañadas, de la isla y de otras islas, pueden ser utilizados libremente.
CRUCEROS
Para los pasajeros que llegan en barcos de crucero, la brevedad de la escala dificulta tener una amplia visión de todos los maravillosos parajes de la isla, aunque disponemos de un Bus Turístico que sale desde la zona portuaria de Santa Cruz de Tenerife (Parada 3), (a escasos metros de donde habitualmente nos deja el Shuttle, que nos lleva gratuitamente desde el barco hasta la entrada del puerto y viceversa) en el norte de la isla, siendo el recorrido del bus turístico muy completo.
Otra opción muy recomendable es, que puede complementarse con la excursión del bus turístico, es la visita a la ciudad de la Laguna, a 9 kms. de Santa Cruz, a la que se puede llegar en el tranvía que va hasta Trinidad (40 minutos), su coste es realmente económico, por lo menos para los peninsulares, también hay autobuses que nos llevan hasta allí, con el mismo billete que el tranvía (ver información de La Laguna).
Otra opción muy recomendable es, que puede complementarse con la excursión del bus turístico, es la visita a la ciudad de la Laguna, a 9 kms. de Santa Cruz, a la que se puede llegar en el tranvía que va hasta Trinidad (40 minutos), su coste es realmente económico, por lo menos para los peninsulares, también hay autobuses que nos llevan hasta allí, con el mismo billete que el tranvía (ver información de La Laguna).
Para realizar excursiones al Teide y Valle de la Orotava, se puede consultar con una agencia de viajes, como por ejemplo:
http://www.portaldeexcursiones.com
http://www.portaldeexcursiones.com
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