MONASTERIO DE LEYRE

Está situado en la impresionante Sierra de Leyre y sobre el pantano de Yesa. Comenzó a construirse en el siglo XI en estilo románico, para terminarse a finales del siglo XV con la nave gótica de la iglesia. En él están enterrados los primeros reyes del Navarra.

Torre y ábsides románicos

Fue levantada en el siglo XI, cuando el estilo románico era todavía una técnica incipiente de muros imponentes. Antes hubo una iglesia prerrománica que fue destruida tras las reformas efectuadas para construir una nueva iglesia monumental.

Cripta

Entras y todo son muros, bóvedas de medio cañón y pilares de toscos capiteles. Pero es la sencillez del primer románico en estado puro. Encima está la iglesia románica y parece que la función de la cripta fue salvar el desnivel de las Leer más pronunciadas laderas de la sierra.

Túnel de San Virila

Su nombre se debe a la estatua que lo preside al final del pasillo, pero en sus inicios fue un pasadizo bajo la iglesia que comunicaba el claustro viejo con las huertas. Los monjes lo atravesaban para ganarse el pan con el sudor de su frente.

Patio del antiguo monasterio

El monasterio medieval se ordenaba en torno a un claustro románico del que ya nada queda. Ahora está conformado por la hospedería y lo preside un solitario arbotante que se diseñó para repartir las cargas de la bóveda gótica de la iglesia.

Puerta speciosa

O puerta preciosa. Construida en el siglo XII, en ella trabajaron distintos artistas, pero es sin duda en la obra del Maestro Esteban, con sus animales desesperados y sus mujeres mesándose los pelos, donde debemos fijar nuestra atención (y admiración).

Panteón de los Reyes navarros

Encerrados tras una reja descansan los restos de los primeros reyes Navarros. Su vida fue azarosa y su muerte no tuvo descanso. Tras la conquista de Navarra los huesos fueron escondidos en los muros de la iglesia para ser recuperados en 1613 y expuestos de nuevo.

Interior de la Iglesia

Es un buen lugar para comparar estilos: el último gótico de la amplia bóveda con sus arcos de 14 m y el primer románico de anchos muros y bóvedas de medio cañón. Pasar de un templo al otro, es cruzar del siglo XI al XVI: quinientos años de progresos técnicos.

Camino de la fuente de San Virila

San Virila fue un Abad que cayó en éxtasis durante 100 años escuchando el canto de un ruiseñor. Casi una eternidad. Por una estrecha senda de hermosas vistas nos adentramos en la sierra hasta la fuente donde sucedió el milagro.